PERFIL DE LA CORTE

Distribución geográfica: Si bien los ministros de la Corte son originarios de diferentes entidades federativas de la República, existe una sobrerrepresentación del Distrito Federal ya que 7 de los ministros provienen de dicha área. Los estados de Chiapas y Jalisco se encuentran en segunda posición contando con 2 ministros cada uno de estos estados. Por último, las entidades federativas de Chihuahua, Querétaro y Veracruz se encuentran representados en la Corte con un ministro cada uno de ellos.

Edad de los ministros: El promedio de edad de los ministros al momento de asumir el cargo ha sido de 53.6 años, siendo el ministro Cossío Díaz el más joven (43 años) y el ministro Valls Hernández el más longevo (63 años).

De esta manera, el promedio de edad de los ministros al retirarse es, en este momento, de 68.6 años. Esto significa que la Corte mexicana ha estado conformada por ministros que se encuentran en la mitad de sus carreras profesionales y no al final como ocurre en otros países como Japón, donde son designados a la edad promedio de 63 años*.

Esto datos no contemplan la edad de la ministra Olga Sánchez Cordero, toda vez que no es pública la información de su fecha de nacimiento.

*Ramseyer J. Mark and Eric B. Rasmusen. Measuring Judicial Independence. The Political Economy of Judging in Japan. The University of Chicago Press, Chicago, 2003.

Estudios y formación: La mayoría de los ministros de la Corte cursaron sus licenciaturas en Derecho en el Distrito Federal, contando la UNAM con siete egresados, la Escuela Libre de Derecho con dos y la Universidad Iberoamericana con uno. Los restantes tres ministros cursaron sus licenciaturas en instituciones educativas del interior de la República: en la Universidad Veracruzana, Universidad de Colima y en la Universidad Autónoma de Guadalajara.

Solamente seis ministros cursaron estudios de maestría (ver gráfico), de los cuales dos fueron las ministras Luna Ramos y Sánchez Cordero. La mitad de ellos cursaron su maestría en instituciones mexicanas (UNAM y Universidad Iberoamericana) mientras que los otros tres ministros en universidades extranjeras de España y Reino Unido. De los seis ministros con estudios de posgrado solamente la mitad de ellos cuentan además con doctorado (siendo la ministra Luna Ramos una de ellas).

Esto significa que sólo el 23% del total de los miembros de la Corte contaron con un doctorado y el 54% con ningún estudio de posgrado. Llama la atención la baja formación académica del plantel de ministros de la Corte, así como la alta formación educativa de las mujeres en relación a los hombres.

Perfil laboral: En esta sección clasificamos a los ministros con base en cuatro diferentes perfiles laborales y sus combinaciones: (1) perfil académico corresponde a aquellos ministros que ejercieron la docencia y la investigación de tiempo completo, (2) perfil carrera judicial a quienes trabajaron anteriormente en algún órgano jurisdiccional, (3) perfil cargo público a los ministros que se desempeñaron en algún otro puesto pública y (4) perfil ámbito privado a aquellos ministros que ejercieron la actividad profesional como litigantes o notarios, por ejemplo.

Once de los trece ministros de la corte (84%) trabajaron anteriormente en algún órgano jurisdiccional pero siete de ellos (54%) vienen exclusivamente de la carrera judicial. Consecuentemente, existe una sobre representación de ministros provenientes de la carrera judicial. El perfil académico es el menos frecuente siendo Cossío Díaz y González Salas los únicos representantes de esta categoría. El ministro Zaldívar Lelo de Larrea es el único que ejerció anteriormente de forma exclusiva el derecho en el ámbito privado, mientras que los ministros Aguirre Anguiano y Sánchez Cordero lo combinaron con el ejercicio de cargo público y carrera judicial, respectivamente. Un dato relevante es que solamente tres ministros de la Corte (23%) tuvieron cargos públicos anteriormente. Este porcentaje es menor al que tradicionalmente existía en la Corte en donde la mayoría de sus integrantes provenían de las estructuras políticas partidarias.